A menudo suele ocurrir que cuando eres sumiso y hablas con alguna Ama por chat, ésta de las primeras cosas que suele preguntarte es por el castigo más duro que has soportado, sí, estoy de acuerdo en que quién así obra tiene muy poco de tal pero el caso es que yo cuando eso ocurre siempre contesto lo mismo, para mí lo peor es la separación de mi Ama, lo más dificil, lo más doloroso por que es un dolor interior, puro, algo que nace de tí y no puedes controlar como si se tratara por ejemplo de aguantar unos azotes, es tuyo te pertenece, lo llevas dentro y despierta cuando esa situación se da, es como un resorte ó un mecanismo, un acto reflejo no condicionado por nada, simplemente está ahí y ocurre.
Hay otros castigos y supongo que es a esos a los que estas personas se refieren cuando te preguntan eso, pero la diferencia es clara entre lo físico y lo emocional, ambos son producto de unas acciones y del deseo de tu Ama pero su naturaleza es completamente distinta, no tienen nada que ver ni en intensidad ó duración, y te desencadenan también por tanto emociones muy diferentes.
Unos azotes se pueden dar por castigo ó como simple recordatorio, lo que es la disciplina y punto. Sin embargo tu Ama puede decidir que sin que hayas hecho nada malo ó sin que se haya producido ningún fallo por tu parte, es decir sin motivo ninguno más que el simple capricho, puede mandarte esa noche a dormir a otra habitación ó bien cenar sin tí, ó prescindir del beso de buenas noches ó no dejar que duermas como es tu costumbre lamiendo sus pies hasta que el más hermoso de los sueños acaba por vencerte. Y eso no es un castigo puesto que no has hecho nada para merecerlo sin embargo en tu "yo" interior no puedes evitar en cierto modo tomarlo como tal aunque en el fondo sabes que no eres merecedor de eso y que por tanto tu Ama no lo hace con fines correctivos, deberías pensar que simplemente Ella esa noche ha decidido que las cosas sean diferentes y ya está, no hay nada más que se esconda tras esa decisión, aún así sientes dolor.
Este capítulo ó post pretendia hablar sobre privaciones y me he ido un poco por lo Cerros de Úbeda, provincia de Jaén, pensaba hablar sobre encierros y las sensaciones que uno experimenta, la primera de las cuales es la "ausencia" pero ausencia total, plena, definitiva, es decir de la nada que te rodea y del todo de lo que careces. De lo que eres ó estas convertido en ese momento. Me trato de explicar mejor; en mi caso mi Ama siempre antes de hacer ó poner nada en práctica me hablaba y me contaba con todo detalle lo que queria conseguir y lo que esperaba de mí. Siempre esperaba que fuera capaz de poderle contar mis sensaciones, lo que hubiera sentido y experimentado. He estado encerrado muchas veces en muchos sitios distintos y en situaciones completamente diferentes unas de otras pero siempre he experimentado la ausencia de mi Ama y la seguridad y tranquilidad que experimento a su lado, esa misma sensación que muchas veces, por ser lo natural es posible pasar por alto, pero al hacer eso nos perdemos un universo de suertes, yo aprendí a valorar cada segundo y doy gracias por haber tenido la oportunidad de hacerlo.
En cuanto a lo físico también experimentas muchas cosas, por ejemplo si el lugar del encierro es pequeño y no tienes movilidad bien por el propio espacio del que dispones, bien por que estes atado ó ambas cosas a la vez sientes cierta angustia y temores, fundados o infundados eso es lo de menos, lo de mas es que estan ahí, que aparecen según avanza tu cautiverio, recuerdo especialmente un dia que fuí encerrado en un armario, se vació la parte de las perchas y yo que tenía atadas las muñecas a los tobillos y los testículos, me subí mal que bien a la parte donde podia sentarme, es decir la que hacía las veces de cajones, la parte de arriba, allí no podia mover un dedo prácticamente, había el espacio justo para mí en esa postura justamente y no en otra. El armario se cerró y solo quedó oscuridad. No pasa mucho tiempo hasta que empiezas a sudar, eso te incomoda y hace que te muevas lo cual es peor porque entonces reparas en algo que hasta ese momento ha pasado inadvertido para tí y es si aquella madera sobre la que estas será capaz de sostener tu peso, porque si no lo es te caeras y no podrás sujetarte ni podrás tampoco poner las manos por cuanto las tienes atadas a los tobillos, piensas que si la tabla cede se astillará y las astillas tienen la mala costumbre de irse a clavar donde mas daño hacen, ese pensamiento te da un miedo atroz, en esto sigues sudando y el calor que hasta entonces no notaste empieza a hacerse grande. Sientes que debes avisar, gritar, hacer ver tu situación, eso es lo que sientes pero lo que debes hacer es permanecer en silencio siendo útil al experimento que tu Ama hace contigo, estoy seguro que Ella vigila y que no va a dejar me ocurra nada malo, se me sosiega el ánimo, sigo sudando pero ya no puedo oir mi corazón y el latido constante que tengo en la cabeza se afloja, trato de percibir alguna luz, algún sonido pero no me llega ninguno, nada, silencio absoluto aunque tengo la misma absoluta certeza de que mi Ama no anda nada lejos, me duelen las articulaciones y no puedo evitar quejarme, es mas un leve sonido de consumo interno que no pretende ser oido más alla de la puerta del armario, un quejidito a modo de alivio, respiro hondo y trato de erguir la espalda que se me acalambra, sigo sudando y deseo poderme rascar ya que me pica todo el cuerpo, me duelen los testiculos que estan atados a mis muñecas y éstas a los tobillos, cualquier cambio de postura ó minimo movimiento los atormenta, percibo olores, no me había dado cuenta de ello pero empiezo a oler, huelo la madera del armario, el calzado, el perfume de las ropas, huelo papel, entre el calzado sé de sobra cual se encuentra allí y empiezo a pensar en él...aquí deben estar las botas altas negras, mas allá los zapatos de tal y cual, en este otro sitio aquellos otros...sin darme cuenta dibujo un mapa de donde me encuentro, han sido probablemente unos pocos segundos acaso un par de minutos pero en ese tiempo no he sentido miedo, he estado tranquilo, ausente de mi cuerpo y su dolor, no me he dado cuenta de eso, el cuerpo encerrado en su habitáculo y la mente libre en otras cosas, una sensación extraña de extraño vacio, cuando vuelvo el cuerpo me pesa horrores, tengo muchos picores y ganas de aliviarlos, sin darme cuenta he debido moverme porque tengo los nudos de las muñecas más firmes también me doy cuenta que estoy mas echado hacia adelante con la cabeza baja entre las piernas...es entonces cuando se abre la puerta del armario, y mi Ama me pregunta como estoy, la luz me ciega, no la oí llegar, le digo no sé como ni por qué que estoy bien y antes de llegar a poder enfocar de nuevo su cara, me acaricia la cabeza y la puerta se vuelve a cerrar, ahora sí escucho sus pasos alejándose y me maldigo por no decirle que no me siento nada bien pero me dura un rato y al poco pienso en que pensará Ella, ¿estara contenta? ¿satisfecha? ¿orgullosa quizá? que bonita palabra esa, tu Ama orgullosa de tí, eso es lo más bonito del mundo. No sé ya cuanto tiempo llevo encerrado, al principio trataba de saber más ó menos el tiempo que llevara, después eso ya no cuenta, no es importante, no va a servirme para nada, estiro la espalda para descargar un poco los riñones y sin querer me hago daño en los atados testiculos, mira que pongo todo el cuidado del mundo en los pequeños movimientos pero es tan reducido el espacio y tan dificil todo que no consigo hacer nada sin sentir dolor, sigo sudando, tengo el culo pegado a la tabla que me sirve de asiento y cada vez es mas dificil moverme, respiro hondo, ya estoy acostumbrado a la oscuridad y al silencio, siento sueño y me empiezo a abandonar pero de alguna manera que ignoro mi Ama parece que lo sabe y se abre de nuevo el armario, antes de que me pregunte le digo que estoy bien pero Ella me empieza a desatar y yo le digo que puedo seguir si quiere pero insiste en que es suficiente y que no estoy preparado para más, no digo nada y con su ayuda empiezo a salir del armario, me cuesta ponerme y tenerme en pie mi Ama me lleva del brazo hasta la cama y me masajea los miembros, luego desata los testiculos y siento un horrible y profundísimo dolor hasta que la sangre vuelve a fluir, estaban hinchados y frios, me ayuda a soportar el dolor las manos de mi Ama masajeándolos. Cuando todo ha pasado y antes de que mi Ama abra la boca me entra un temblor que no puedo controlar, Ella me abraza, me dice la palabra mágica "tranquilo" "tranquilo" y entonces rompo a llorar pero muy muy tranquilo, calmado, abandonado de mí y feliz. No se explicar esto.
Luego le conté a mi Ama un ratito después lo que había sentido como siempre hacía después de cada cosa nueva que experimentaba por primera vez.
Supé que el encierro duró 35 minutos.
Hay otros castigos y supongo que es a esos a los que estas personas se refieren cuando te preguntan eso, pero la diferencia es clara entre lo físico y lo emocional, ambos son producto de unas acciones y del deseo de tu Ama pero su naturaleza es completamente distinta, no tienen nada que ver ni en intensidad ó duración, y te desencadenan también por tanto emociones muy diferentes.
Unos azotes se pueden dar por castigo ó como simple recordatorio, lo que es la disciplina y punto. Sin embargo tu Ama puede decidir que sin que hayas hecho nada malo ó sin que se haya producido ningún fallo por tu parte, es decir sin motivo ninguno más que el simple capricho, puede mandarte esa noche a dormir a otra habitación ó bien cenar sin tí, ó prescindir del beso de buenas noches ó no dejar que duermas como es tu costumbre lamiendo sus pies hasta que el más hermoso de los sueños acaba por vencerte. Y eso no es un castigo puesto que no has hecho nada para merecerlo sin embargo en tu "yo" interior no puedes evitar en cierto modo tomarlo como tal aunque en el fondo sabes que no eres merecedor de eso y que por tanto tu Ama no lo hace con fines correctivos, deberías pensar que simplemente Ella esa noche ha decidido que las cosas sean diferentes y ya está, no hay nada más que se esconda tras esa decisión, aún así sientes dolor.
Este capítulo ó post pretendia hablar sobre privaciones y me he ido un poco por lo Cerros de Úbeda, provincia de Jaén, pensaba hablar sobre encierros y las sensaciones que uno experimenta, la primera de las cuales es la "ausencia" pero ausencia total, plena, definitiva, es decir de la nada que te rodea y del todo de lo que careces. De lo que eres ó estas convertido en ese momento. Me trato de explicar mejor; en mi caso mi Ama siempre antes de hacer ó poner nada en práctica me hablaba y me contaba con todo detalle lo que queria conseguir y lo que esperaba de mí. Siempre esperaba que fuera capaz de poderle contar mis sensaciones, lo que hubiera sentido y experimentado. He estado encerrado muchas veces en muchos sitios distintos y en situaciones completamente diferentes unas de otras pero siempre he experimentado la ausencia de mi Ama y la seguridad y tranquilidad que experimento a su lado, esa misma sensación que muchas veces, por ser lo natural es posible pasar por alto, pero al hacer eso nos perdemos un universo de suertes, yo aprendí a valorar cada segundo y doy gracias por haber tenido la oportunidad de hacerlo.
En cuanto a lo físico también experimentas muchas cosas, por ejemplo si el lugar del encierro es pequeño y no tienes movilidad bien por el propio espacio del que dispones, bien por que estes atado ó ambas cosas a la vez sientes cierta angustia y temores, fundados o infundados eso es lo de menos, lo de mas es que estan ahí, que aparecen según avanza tu cautiverio, recuerdo especialmente un dia que fuí encerrado en un armario, se vació la parte de las perchas y yo que tenía atadas las muñecas a los tobillos y los testículos, me subí mal que bien a la parte donde podia sentarme, es decir la que hacía las veces de cajones, la parte de arriba, allí no podia mover un dedo prácticamente, había el espacio justo para mí en esa postura justamente y no en otra. El armario se cerró y solo quedó oscuridad. No pasa mucho tiempo hasta que empiezas a sudar, eso te incomoda y hace que te muevas lo cual es peor porque entonces reparas en algo que hasta ese momento ha pasado inadvertido para tí y es si aquella madera sobre la que estas será capaz de sostener tu peso, porque si no lo es te caeras y no podrás sujetarte ni podrás tampoco poner las manos por cuanto las tienes atadas a los tobillos, piensas que si la tabla cede se astillará y las astillas tienen la mala costumbre de irse a clavar donde mas daño hacen, ese pensamiento te da un miedo atroz, en esto sigues sudando y el calor que hasta entonces no notaste empieza a hacerse grande. Sientes que debes avisar, gritar, hacer ver tu situación, eso es lo que sientes pero lo que debes hacer es permanecer en silencio siendo útil al experimento que tu Ama hace contigo, estoy seguro que Ella vigila y que no va a dejar me ocurra nada malo, se me sosiega el ánimo, sigo sudando pero ya no puedo oir mi corazón y el latido constante que tengo en la cabeza se afloja, trato de percibir alguna luz, algún sonido pero no me llega ninguno, nada, silencio absoluto aunque tengo la misma absoluta certeza de que mi Ama no anda nada lejos, me duelen las articulaciones y no puedo evitar quejarme, es mas un leve sonido de consumo interno que no pretende ser oido más alla de la puerta del armario, un quejidito a modo de alivio, respiro hondo y trato de erguir la espalda que se me acalambra, sigo sudando y deseo poderme rascar ya que me pica todo el cuerpo, me duelen los testiculos que estan atados a mis muñecas y éstas a los tobillos, cualquier cambio de postura ó minimo movimiento los atormenta, percibo olores, no me había dado cuenta de ello pero empiezo a oler, huelo la madera del armario, el calzado, el perfume de las ropas, huelo papel, entre el calzado sé de sobra cual se encuentra allí y empiezo a pensar en él...aquí deben estar las botas altas negras, mas allá los zapatos de tal y cual, en este otro sitio aquellos otros...sin darme cuenta dibujo un mapa de donde me encuentro, han sido probablemente unos pocos segundos acaso un par de minutos pero en ese tiempo no he sentido miedo, he estado tranquilo, ausente de mi cuerpo y su dolor, no me he dado cuenta de eso, el cuerpo encerrado en su habitáculo y la mente libre en otras cosas, una sensación extraña de extraño vacio, cuando vuelvo el cuerpo me pesa horrores, tengo muchos picores y ganas de aliviarlos, sin darme cuenta he debido moverme porque tengo los nudos de las muñecas más firmes también me doy cuenta que estoy mas echado hacia adelante con la cabeza baja entre las piernas...es entonces cuando se abre la puerta del armario, y mi Ama me pregunta como estoy, la luz me ciega, no la oí llegar, le digo no sé como ni por qué que estoy bien y antes de llegar a poder enfocar de nuevo su cara, me acaricia la cabeza y la puerta se vuelve a cerrar, ahora sí escucho sus pasos alejándose y me maldigo por no decirle que no me siento nada bien pero me dura un rato y al poco pienso en que pensará Ella, ¿estara contenta? ¿satisfecha? ¿orgullosa quizá? que bonita palabra esa, tu Ama orgullosa de tí, eso es lo más bonito del mundo. No sé ya cuanto tiempo llevo encerrado, al principio trataba de saber más ó menos el tiempo que llevara, después eso ya no cuenta, no es importante, no va a servirme para nada, estiro la espalda para descargar un poco los riñones y sin querer me hago daño en los atados testiculos, mira que pongo todo el cuidado del mundo en los pequeños movimientos pero es tan reducido el espacio y tan dificil todo que no consigo hacer nada sin sentir dolor, sigo sudando, tengo el culo pegado a la tabla que me sirve de asiento y cada vez es mas dificil moverme, respiro hondo, ya estoy acostumbrado a la oscuridad y al silencio, siento sueño y me empiezo a abandonar pero de alguna manera que ignoro mi Ama parece que lo sabe y se abre de nuevo el armario, antes de que me pregunte le digo que estoy bien pero Ella me empieza a desatar y yo le digo que puedo seguir si quiere pero insiste en que es suficiente y que no estoy preparado para más, no digo nada y con su ayuda empiezo a salir del armario, me cuesta ponerme y tenerme en pie mi Ama me lleva del brazo hasta la cama y me masajea los miembros, luego desata los testiculos y siento un horrible y profundísimo dolor hasta que la sangre vuelve a fluir, estaban hinchados y frios, me ayuda a soportar el dolor las manos de mi Ama masajeándolos. Cuando todo ha pasado y antes de que mi Ama abra la boca me entra un temblor que no puedo controlar, Ella me abraza, me dice la palabra mágica "tranquilo" "tranquilo" y entonces rompo a llorar pero muy muy tranquilo, calmado, abandonado de mí y feliz. No se explicar esto.
Luego le conté a mi Ama un ratito después lo que había sentido como siempre hacía después de cada cosa nueva que experimentaba por primera vez.
Supé que el encierro duró 35 minutos.
3 comentarios:
este post, es entre otros, evidencia clara de por que he recomendado a todos este blog :)...
HOLA. HE DESCUBIERTO QUE ME ENCANTA Y EXCITA SER AMA. PERO, COMO ESTOY EMPEZANDO ME GUSTARIA SABER QUE ES LO QUE LE GUSTA Y QUE LE PUEDO HACER A MI SUMISO.GRACIAS
Puedes penetrarme con un arnés de consolador uncut XXXL primero duro y luego más duro y bruscamente descansando y volviendo a empezar durante dias
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