martes, 26 de diciembre de 2006

Los cuernos

Voy a romper un poco la tónica natural del blog y ha hablar de algo que por alguna razón ocurrida en los últimos dias ha venido rondandome la cabeza.
Es el tema de los cuernos ó infidelidades aunque no se como llamar a esto para que se adecúe a mi experiencia ya que técnicamente no era una infidelidad pues no existía ningun tipo de engaño ni de secreto. El caso es que mi Ama con alguna frecuencia decidia que necesitaba sexo completo con alguien, cosa ésta que nunca tenia conmigo. No voy a contar detalles previos ni nada por el estilo, solo quería decir que siempre tuve para mí esos momentos como los peores en mi vida pues mi Ama, su cuerpo eran para mí lugar sagrado...yo podia acariciarla, besarla, comer, tocar, lamer y en ocasiones entrar en ella si bien nunca jamás ni una sola vez me permitió tener mi propio placer en su interior. No me quejo de nada, al contrario yo siempre gocé una enormidad dándole lo que esperaba y necesitaba de mí y siempre estuve contento y feliz de ser una herramienta útil para su placer.
Cuando llegado el momento de que mi Ama gozara del sexo con otro hombre yo debía estar presente si aquello ocurría en casa y mirar. La forma siempre era la misma, mi Ama me llevaba al dormitorio, me hablaba y me contaba lo que pensaba hacer y las razones por las que lo haría, luego me preguntaba como estaba y como me sentía, me preguntaba tambien si la quería y en que grado lo hacía, si entendía la naturaleza de lo que iba a ocurrir y si sería capaz de comportarme como me había venido enseñando y si sabría estar a la altura de lo que esperaba de mí y si podría luego una vez terminado todo sentirse orgullosa de mí. Yo decía a todo que sí, que nada había mas importante en mi vida que su felicidad y su gusto y placer y que la quería mas de lo que se puede querer. Me besaba, uno de esos besos suyos de volverse loco, de los que te sacan el espíritu y te dejan rendido a verlas venir, el cuerpo flojo como ido y el pene encerrado peleando por cubir el maximo espacio disponible en el cinturon de castidad hasta que ya no puede mas por que no hay mas lugar para él, despues me hace colocarme al lado de la cama que va a ocupar Ella y hace pasar al otro hombre, después de eso mi Ama se entrega al goce del sexo y yo debo quedar quieto, mirar y nada más...pero me cuesta horrores, por un lado se que no debo mostrar emociones ni mover un músculo pero el cuerpo me pide acercarme y defender a mi Ama de lo que para mí es un acto ultrajante, un ultraje a quien es para mí mi razón de ser y eso me pone enfermo por que sinceramente a duras penas me puedo contener y por otro lado, mi parte racional, la que ha sido enseñada y entrenada me dice que tranquilo que no ocurre nada que mi Ama no quiera que pase, que todo está bien, que Ella está gozando con ese acto y que yo debo participar de su placer estando ahí como mi Ama ha decidido que esté. La excitación que tenía siempre despues de su beso se acababa viniendo a abajo una vez dejamos de estar solos, mi Ama siempre trató que consiguiera mantenerme excitado en el transcurso del acto sexual con el otro hombre pero yo no era capaz de ello por lo que Ella solia recurrir a apretarme los testículos, a hacerme daño en ellos siempre controlando todo muy bien pues me conocía y conocia mi cuerpo como el suyo propio y sabía hasta donde podia llegar, con esa maniobra mi pene reaccionaba y crecia en la medida de lo posible, esto es, muy poco dentro del cinturón pero a mi Ama le gustaba así y mi cuerpo hacía lo que Ella queria. Dolor fisico y dolor mental, placer fisico y placer mental y eso unido llevaba a mi Ama a unos maravillosos orgasmos, unos increibles momentos de goce que yo veia en primer plano en su cara pues Ella a parte de besarme, solia acariciarme la cabeza y la sujetaba para que pudiera mirar a sus ojos y verle en la cara los efectos de su placer. Si después de acabar con el otro hombre quedaba satisfecha, éste se iba y entonces yo subia a la cama y dormiamos, dormir dormia Ella mientras yo lo intentaba como si hubieramos gozado ambos y tras acabar calleramos rendidos de cansancio. También podia ocurrir que mi Ama necesitara más y en ese caso yo satisfacía su necesidad con mi lengua hasta que me decia "basta ya está bien así" depués de calmada solía quedarse muy dormida conmigo detrás suyo abrazándola y sintiendo yo su cuerpo sudoroso rozando el mio.

jueves, 14 de diciembre de 2006

Voluntad


Una vez en una de las muchas visitas de amigas que mi Ama recibía en casa escuché sin querer, bueno por expresarlo mejor debería decir que oí, ya que para escuchar debes prestar atención a lo que oyes, oí decir a mi Ama que su sumiso, o sea yo, tenía una fuerza de voluntad que yo mismo desconocía, la natural curiosidad por saber más me impulsaba a escuchar pero si mi Ama hubiera querido que yo supiera lo que estaba hablando con esa persona habría decidido que yo estuviera presente y no era el caso, por lo que me retiré. Concluyo que en ese episodio lo que prevaleció fue la voluntad de mi Ama por encima de la mia propia. No había vuelto a pensar en eso para nada hasta ahora que buscaba cosas que contar en el blog y me pareció bonito hablar sobre la voluntad. Recuerdo varias cosas y fases en la educación ó el control de la voluntad. La eterna lucha de un sumiso es la pelea que tiene para dejarse de controlar, uno en libertad no es consciente de la cantidad de controles que ejercemos en el dia a dia, pero en un sumiso es diferente. Cuando te das a otra persona lo que haces precisamente es entregar esos controles y los derechos que sobre tí tienes.
La voluntad por hacer cosas muchas veces ni siquiera es algo que ocurra de un modo consciente, pero otras en cambio sí que lo es y es ahi donde entras tú y tu dominio de la situación, ya sé que suena paradójico o raro tener dominio sobre algo, debes dominar el hecho de saber que no te controlas por que eso está en manos de la persona que te posee. Pongo un ejemplo, cuando mi Ama trataba de enseñarme estas cosas solía ponerme desnudo a modo de perro en un extremo del pasillo de casa y decía "quieto ahí" luego se iba alejando de mí y aunque tenías una orden directa que entendías perfectamente tu deseo o necesidad era ir tras de ella pero te había dejado muy clara cual era su voluntad, de haberme movido como era mi necesidad e ir a su lado para mostrarle mi cariño seguro que se hubiera disgustado porque no habría atendido su deseo sino el mio, el hecho de permanecer allí quieto, desnudo como un perro a la espera de la señal de tu Dueña para moverme mientras la oia y veía ir de un lado para otro y además dándome cuenta que llega un momento en que si bien al principio de estar así piensas en tu situación y haces el esfuerzo que se te pide después de un tiempo entras en otra especie de fase donde simplemente te dejas llevar, ya no necesitas usar la cabeza, quiero decir, no te hace falta darle vueltas a lo que te dijeron porque por alguna razón ya lo has interiorizado y es como algo natural. Tu cerebro responde como un acto reflejo sin esfuerzo porque has aprendido que su palabra es su voluntad y que tu no tienes más voluntad que la suya propia por eso ante el estímulo actúas como se espera de tí.
Los estímulos también son tema a hablar por separado pero me ha venido ahora un recuerdo muy bonito sobre esto. Tengo un buen adiestramiento canino, aprendí las normas básicas y lo más importante a sentirme y a saberme perro, esto es algo que encantaba a mi Ama, el caso es que un dia sin ninguna razón ni enseñanza específica andabamos en la casa y mi Ama tuvo que salir, yo la acompañé como era normal, me acarició y tranquilizó diciendome que no tardaría y una vez que traspasó la puerta y yo al otro lado escuchaba como subía el ascensor se me dispararon los instintos y arañe la puerta con las uñas y ladré, aún hoy no encuentro explicación racional a aquello pero a la vuelta mi Ama me acaricio la cabeza y me dijo que le había encantado. Creo que simplemente ocurrió lo normal, estas en situación de perro, que es lo que eres en ese momento, tú dueña sale y reaccionas de esa manera perfectamente normal. Acción-reacción sin más.
Volviendo a lo de la voluntad esta se manifiesta no solo en que asumes como propia la de tu Ama sino también en que no cuestionas nada, da igual la naturaleza de lo que te pida y la opinión que te merezca, no estás para opinar sino para hacer lo que tu Ama demanda y espera de tí. Por eso si un dia te lleva con ella a cualquier lugar y a la entrada te dice algo asi como "esperame aquí tengo una cosa que hacer. Puedes moverte de esquina a esquina del edificio pero ni un paso más en ninguna otra dirección. Ya vuelvo." La ves marchar y simplemente lo que ocurre es que esperas su regreso justo como te ha dicho que hagas. A mi Ama le encantaba hacerme esperar, llevarme a los sitios y dejarme esperándola. Decía que se sentia especial sabiendo que me tenia en algun lugar pensando en ella y deseando que volviera. Imaginándome quieto o en movimiento sin nada más en la cabeza que el momento en que volviera a mi lado. Porque solía decirme se me ponian los ojos más bonitos del mundo cuando la veia otra vez después de ese tiempo de espera. Por supuesto ningún reproche o pero por mi parte, solamente quedarme esperando y ya, nada más, es dificil explicarlo.

sábado, 9 de diciembre de 2006

Privaciones y encierros


A menudo suele ocurrir que cuando eres sumiso y hablas con alguna Ama por chat, ésta de las primeras cosas que suele preguntarte es por el castigo más duro que has soportado, sí, estoy de acuerdo en que quién así obra tiene muy poco de tal pero el caso es que yo cuando eso ocurre siempre contesto lo mismo, para mí lo peor es la separación de mi Ama, lo más dificil, lo más doloroso por que es un dolor interior, puro, algo que nace de tí y no puedes controlar como si se tratara por ejemplo de aguantar unos azotes, es tuyo te pertenece, lo llevas dentro y despierta cuando esa situación se da, es como un resorte ó un mecanismo, un acto reflejo no condicionado por nada, simplemente está ahí y ocurre.
Hay otros castigos y supongo que es a esos a los que estas personas se refieren cuando te preguntan eso, pero la diferencia es clara entre lo físico y lo emocional, ambos son producto de unas acciones y del deseo de tu Ama pero su naturaleza es completamente distinta, no tienen nada que ver ni en intensidad ó duración, y te desencadenan también por tanto emociones muy diferentes.
Unos azotes se pueden dar por castigo ó como simple recordatorio, lo que es la disciplina y punto. Sin embargo tu Ama puede decidir que sin que hayas hecho nada malo ó sin que se haya producido ningún fallo por tu parte, es decir sin motivo ninguno más que el simple capricho, puede mandarte esa noche a dormir a otra habitación ó bien cenar sin tí, ó prescindir del beso de buenas noches ó no dejar que duermas como es tu costumbre lamiendo sus pies hasta que el más hermoso de los sueños acaba por vencerte. Y eso no es un castigo puesto que no has hecho nada para merecerlo sin embargo en tu "yo" interior no puedes evitar en cierto modo tomarlo como tal aunque en el fondo sabes que no eres merecedor de eso y que por tanto tu Ama no lo hace con fines correctivos, deberías pensar que simplemente Ella esa noche ha decidido que las cosas sean diferentes y ya está, no hay nada más que se esconda tras esa decisión, aún así sientes dolor.
Este capítulo ó post pretendia hablar sobre privaciones y me he ido un poco por lo Cerros de Úbeda, provincia de Jaén, pensaba hablar sobre encierros y las sensaciones que uno experimenta, la primera de las cuales es la "ausencia" pero ausencia total, plena, definitiva, es decir de la nada que te rodea y del todo de lo que careces. De lo que eres ó estas convertido en ese momento. Me trato de explicar mejor; en mi caso mi Ama siempre antes de hacer ó poner nada en práctica me hablaba y me contaba con todo detalle lo que queria conseguir y lo que esperaba de mí. Siempre esperaba que fuera capaz de poderle contar mis sensaciones, lo que hubiera sentido y experimentado. He estado encerrado muchas veces en muchos sitios distintos y en situaciones completamente diferentes unas de otras pero siempre he experimentado la ausencia de mi Ama y la seguridad y tranquilidad que experimento a su lado, esa misma sensación que muchas veces, por ser lo natural es posible pasar por alto, pero al hacer eso nos perdemos un universo de suertes, yo aprendí a valorar cada segundo y doy gracias por haber tenido la oportunidad de hacerlo.
En cuanto a lo físico también experimentas muchas cosas, por ejemplo si el lugar del encierro es pequeño y no tienes movilidad bien por el propio espacio del que dispones, bien por que estes atado ó ambas cosas a la vez sientes cierta angustia y temores, fundados o infundados eso es lo de menos, lo de mas es que estan ahí, que aparecen según avanza tu cautiverio, recuerdo especialmente un dia que fuí encerrado en un armario, se vació la parte de las perchas y yo que tenía atadas las muñecas a los tobillos y los testículos, me subí mal que bien a la parte donde podia sentarme, es decir la que hacía las veces de cajones, la parte de arriba, allí no podia mover un dedo prácticamente, había el espacio justo para mí en esa postura justamente y no en otra. El armario se cerró y solo quedó oscuridad. No pasa mucho tiempo hasta que empiezas a sudar, eso te incomoda y hace que te muevas lo cual es peor porque entonces reparas en algo que hasta ese momento ha pasado inadvertido para tí y es si aquella madera sobre la que estas será capaz de sostener tu peso, porque si no lo es te caeras y no podrás sujetarte ni podrás tampoco poner las manos por cuanto las tienes atadas a los tobillos, piensas que si la tabla cede se astillará y las astillas tienen la mala costumbre de irse a clavar donde mas daño hacen, ese pensamiento te da un miedo atroz, en esto sigues sudando y el calor que hasta entonces no notaste empieza a hacerse grande. Sientes que debes avisar, gritar, hacer ver tu situación, eso es lo que sientes pero lo que debes hacer es permanecer en silencio siendo útil al experimento que tu Ama hace contigo, estoy seguro que Ella vigila y que no va a dejar me ocurra nada malo, se me sosiega el ánimo, sigo sudando pero ya no puedo oir mi corazón y el latido constante que tengo en la cabeza se afloja, trato de percibir alguna luz, algún sonido pero no me llega ninguno, nada, silencio absoluto aunque tengo la misma absoluta certeza de que mi Ama no anda nada lejos, me duelen las articulaciones y no puedo evitar quejarme, es mas un leve sonido de consumo interno que no pretende ser oido más alla de la puerta del armario, un quejidito a modo de alivio, respiro hondo y trato de erguir la espalda que se me acalambra, sigo sudando y deseo poderme rascar ya que me pica todo el cuerpo, me duelen los testiculos que estan atados a mis muñecas y éstas a los tobillos, cualquier cambio de postura ó minimo movimiento los atormenta, percibo olores, no me había dado cuenta de ello pero empiezo a oler, huelo la madera del armario, el calzado, el perfume de las ropas, huelo papel, entre el calzado sé de sobra cual se encuentra allí y empiezo a pensar en él...aquí deben estar las botas altas negras, mas allá los zapatos de tal y cual, en este otro sitio aquellos otros...sin darme cuenta dibujo un mapa de donde me encuentro, han sido probablemente unos pocos segundos acaso un par de minutos pero en ese tiempo no he sentido miedo, he estado tranquilo, ausente de mi cuerpo y su dolor, no me he dado cuenta de eso, el cuerpo encerrado en su habitáculo y la mente libre en otras cosas, una sensación extraña de extraño vacio, cuando vuelvo el cuerpo me pesa horrores, tengo muchos picores y ganas de aliviarlos, sin darme cuenta he debido moverme porque tengo los nudos de las muñecas más firmes también me doy cuenta que estoy mas echado hacia adelante con la cabeza baja entre las piernas...es entonces cuando se abre la puerta del armario, y mi Ama me pregunta como estoy, la luz me ciega, no la oí llegar, le digo no sé como ni por qué que estoy bien y antes de llegar a poder enfocar de nuevo su cara, me acaricia la cabeza y la puerta se vuelve a cerrar, ahora sí escucho sus pasos alejándose y me maldigo por no decirle que no me siento nada bien pero me dura un rato y al poco pienso en que pensará Ella, ¿estara contenta? ¿satisfecha? ¿orgullosa quizá? que bonita palabra esa, tu Ama orgullosa de tí, eso es lo más bonito del mundo. No sé ya cuanto tiempo llevo encerrado, al principio trataba de saber más ó menos el tiempo que llevara, después eso ya no cuenta, no es importante, no va a servirme para nada, estiro la espalda para descargar un poco los riñones y sin querer me hago daño en los atados testiculos, mira que pongo todo el cuidado del mundo en los pequeños movimientos pero es tan reducido el espacio y tan dificil todo que no consigo hacer nada sin sentir dolor, sigo sudando, tengo el culo pegado a la tabla que me sirve de asiento y cada vez es mas dificil moverme, respiro hondo, ya estoy acostumbrado a la oscuridad y al silencio, siento sueño y me empiezo a abandonar pero de alguna manera que ignoro mi Ama parece que lo sabe y se abre de nuevo el armario, antes de que me pregunte le digo que estoy bien pero Ella me empieza a desatar y yo le digo que puedo seguir si quiere pero insiste en que es suficiente y que no estoy preparado para más, no digo nada y con su ayuda empiezo a salir del armario, me cuesta ponerme y tenerme en pie mi Ama me lleva del brazo hasta la cama y me masajea los miembros, luego desata los testiculos y siento un horrible y profundísimo dolor hasta que la sangre vuelve a fluir, estaban hinchados y frios, me ayuda a soportar el dolor las manos de mi Ama masajeándolos. Cuando todo ha pasado y antes de que mi Ama abra la boca me entra un temblor que no puedo controlar, Ella me abraza, me dice la palabra mágica "tranquilo" "tranquilo" y entonces rompo a llorar pero muy muy tranquilo, calmado, abandonado de mí y feliz. No se explicar esto.
Luego le conté a mi Ama un ratito después lo que había sentido como siempre hacía después de cada cosa nueva que experimentaba por primera vez.
Supé que el encierro duró 35 minutos.

viernes, 8 de diciembre de 2006

El imperio de los sentidos

A menudo vemos sólo lo que queremos ver y oimos, ó mejor dicho escuchamos lo que deseamos escuchar y nada más, esto es siempre así y es una pena por varias razones, la primera de todas porque al hacerlo nos estamos perdiendo lo que otros quieren hacernos ver ya que no somos receptivos nada más que a lo que nos importa.
Suena egoista y lo cierto es que lo és. El mundo que nos rodea esta lleno de sensaciones que no percibimos simplemente por puro egoismo.
¿Que tiene esto que ver con el BDSM?, sinceramente pienso que mucho desde el mismo momento en que para uno el BDSM es un mundo de sensaciones, contaré mi experiencia; mi Ama me enseñó el valor de los tiempos, el espacio y la ausencia ¿que qué tienen que ver? pues creo que el tiempo, la existencia del sumiso, su propia razón de ser es su Ama y si éste cuando está con ella no experimenta emociones nuevas, diferentes cada vez que está a su lado mal sumiso es, ¿como se arregla eso? pues muy fácil aprendiendo a sentir y percibir a su Ama a través de todo lo que de ella emana y a recibir de su persona por los cinco sentidos.

¿Que pasa con la vista?, desde el mismo momento en que te ves privado de ella pierdes muchas más cosas que la sola visión, pierdes la noción del espacio porque no te sientes cómodo ni seguro si has de moverte de una determinada posición a un lugar distinto y debes recurrir a otros sentidos para suplir su carencia, y pierdes también el control del tiempo. Aquí hago un inciso sobre un tema que ya trataré en su apartado correspondiente, un sumiso no debe tener ningún control sobre sí mismo, básicamente ha de ser capaz de controlar sus instintos más primarios y animales lo que seguramente le supondrá una lucha constante entre la instruccion de su Ama de abandono de todo control sobre su persona y a la vez la órden directa de poderse controlar en ese extremo, quiero decir de no buscar su placer físico, no moverse si se encuentra dentro de ella o no eyacular por mucho que su cuerpo le diga que está a punto de hacerlo, y ésto exige un control, pero como ya dije esto lo hablaré en otro momento pero me viene muy al pelo para el tema de los sentidos. Cuando mi Ama me hablaba sobre estos, entendí inmediatamente que todo mi tiempo a su lado era un regalo, y me dí cuenta que no lo tomaba al 100% porque a su lado ya me sentia enorme y feliz estando por ejemplo con los ojos cerrados apoyado en su regazo o en su pecho. El tema es que yo siempre he sido muy receptivo, si ella me hablaba podía sin esfuerzo ninguno, al menos eso creo ó yo no me daba cuenta de hacerlo de poder acallar cualquier ruido ó el sonido de la televisión ó lo que fuera que me impidiera escuchar su voz, alguna canción (le gustaba cantarme) ó cualquier cosa que me quisiera decir.
En cuanto al tacto era para mí una tortura estar en la misma habitación ó en el mismo sofa que mi dueña y no poderla tocar, me refiero a mi cuerpo tocando el suyo, bien mis manos en las suyas o debajo de ella o rozandome de cualquier manera, no concebía estar viendo tv y no tocar a mi ama, o que ella tuviera sus pies en mí, es decir siempre contacto fisico. Si hablamos del gusto pues !!que decir!! conocia a la perfección todos los sabores de su cuerpo y como los perros sabía por ellos si estaba contenta o tensa, eso se nota igual que ocurre con los olores, no sabe ni huele igual si esta calmada o nerviosa, esto al principio no lo puedes notar y es cuestión mas que de práctica, de conocer a tu Ama, pasa más o menos como con las miradas, que cuando conoces a una persona muy bien, te sobran las palabras porque con la mirada ya sabes lo que quiere. Decía mas arriba lo del control por que cuando eres capaz de sentir a tu Ama con los cinco sentidos notas aún más de su ausencia si te encuentras privado de uno de ellos, a ver quiero decir, si yo estoy por ejemplo atado en la cama con los ojos vendados haré lo imposible por agudizar el oido y el olfato para que a la mínima señal de que se acerca pueda saberlo inmediatamente. Comentaba lo del control por que en mi caso si estaba de rodillas y en ese momento me negaba la visión mi primera reacción instintiva era seguirla rozandome con ella, escuchando sus pasos y sintiendo su caminar, pero ella me cegaba no para que hiciera eso sino para quedar a la espera, el control consiste en vencer mi necesidad de seguirla y permanecer allí atento y quieto tal como ella espera de mí. Antes he mencionado la ausencia y lo hice porque si no tengo su visión sufro la ausencia de su imagen pero esto ocurre igual si no tengo oido ó no puedo olerla ni tocarla ó saborearla, la ausencia es algo terrible que solo cuando percibes a tu Ama con los cinco sentidos puedes entender el extremo al que puedes llegar y duele por que te pierdes partes del conjunto de la persona más importante en tu vida, es muy mal comparado y pido perdon por ello, como si te dijeran que te llevan de vacaciones a disneylandia y luego no te dejan salir de la habitación del hotel, nadie te podrá negar que estuviste allí, pero claro, no fué lo mismo.

miércoles, 6 de diciembre de 2006

La razón de ser

Decía Ortega aquello de "yo soy yo y mi circunstancia", la primera parte de la frase es clara pero ¿qué es la circunstancia? he mirado en el diccionario y de todo lo que he leido me quedo con ésto "Conjunto de lo que está en torno a alguien; el mundo en cuanto mundo de alguien" y estas pocas palabras sirven para explicar todo un modo de ser y de sentir...mi entorno, mi mundo, todo lo que rodea mi vida es mi circunstancia, exactamente igual que lo es para el resto de los mortales pero enteramente diferente a la de la mayoria ¿por que? bueno esa es una cuestión dificil de responder pero sí que me siento en cierto modo privilegiado porque siempre supe hacia donde debia caminar y además pude hacerlo en la mejor compañia en cada momento. Y digo privilegiado en el sentido de que uno ha de sentirse así cuando tiene muy claro su lugar en el mundo, y si encima como es mi caso ha contado con la ayuda necesaria y las enseñanzas precisas no puede mas que estar infinitamente agradecido y en deuda siempre.

He titulado esta entrada la razón de ser porque en estos tiempos de libertad forzada, no me quedan muchas más cosas que los recuerdos y la memoria y como sea que uno no quiere por nada del mundo olvidar su patrimonio piensa de continuo en todo eso...mi razón de ser es la condición de hombre sumiso entregado de manera absoluta al poder de su Ama, a la voluntad de la persona que lo posee y que convertida en su dueña maneja su vida en la obediencia, el abandono de uno mismo y en el mejor servicio a esa persona. Obvio decir que no tengo la menor duda acerca de mi condición sumisa, nunca hice ningún tipo de esfuerzo por ser lo que soy, simplemente nací así si bien con el paso de los años he ido aprendiendo cosas naturalmente, y encajando en el lugarque tenia destinado. No tengo motivo alguno para la queja, ni sensación de haberme perdido nada importante (a decir verdad a mis 39 años me he perdido una cosa que aún no he podido experimentar pero que no voy a decir aqui que cosa es esa) sino todo lo contrario, soy muy consciente de que he tenido una vida muy afortunada, plena y llena, rebosante de experiencias y sentimientos que a muchas personas se les escapan pero que por alguna razón que desconozco a mí me ha tocado vivirlos.

Hay quien nace predestinado a ser presidente de lo que sea, ó ser el primer ser humano en hacer esto ó aquello ó a ser el descubridor de yo que se que cosa y la razón de ser de cada uno de ellos es alcanzar tales metas, en mi caso yo siempre supe lo que era y como debia ser mi vida, he pasado la mayor parte de mi vida en sumisión siendo esclavo, jamás me ha faltado nada, me he sabido cuidado, querido, amado y protegido. He tenido tiempos para mis cosas y respeto en mis momentos de bajón y cuando he necesitado estar solo para pensar. Y nunca he estado solo en momentos de flaqueza ni cuando he llorado y siempre he tenido aliento y ánimo por aprender y para ser mejor y todo el apoyo que en distintos momentos de mi vida he podido necesitar. He escrito esta entrada en el blog porque antes siempre tenia con quien hablar y ahora no puedo hacer eso. Me he quedado mas relajado.